Escríbeme hasta en el último lugar posible

Palabras retumban entre silencios sellando mis sentidos. 
Busqué hasta en el último recuerdo un lugar inimaginable y no logré encontrarlo; a lo mejor y sea la falta de un sentimiento original, el engaño acumulado o las lágrimas que hoy por hoy me doy cuenta que no valieron la pena.   

Golpes con la palma de la mano derecha en el pecho. Arrepentimientos que sin duda, no sirven para nada y un pasado que a decir verdad; duele. 

Con ánimos de cualquier cosa, hoy regreso a ese lugar que escondo entre las sombras de mi pasado, regreso a perderme entre esos ojos verdes con los que soñaba, para acariciar los hilos de su pelo y los colores de su aire. Para sentir la suavidad de sus manos y morderme las uñas de los nervios. Para acariciarle las pestañas con mi respiración o la espalda con un beso cálido. Regreso para no morir. Tal vez con ganas de algo más. Tal vez de escuchar su voz de nuevo, los susurros a media noche o las discusiones existenciales. Tantas mentiras y tantos engaños. Tal vez lo único que quiero es sufrir una vez más, llorar con ganas de nuevo y engañarme a mi misma. 

Pensar en cosas que pasaron y en realidad no, en recuerdos que vienen a mi mente como un eco en mi cabeza repitiendo aquello que ya sé; que el amor no es cuerdo, pero sin duda puedo responder ahora, no es cuerdo pero es puro, y la pureza de su mirada quedó clavada en los vidrios de los lentes oscuros que usaba y su piel, terminó por mostrar la debilidad que tanto le caracterizaba, terminó por sacar a la superficie ese miedo irremediable, por demostrar lo que desde el principió sospeché; que nada era cierto.

Sin importar lo demás, cierro los ojos y sigo regresando en el tiempo para oler una vez más el aroma de su nuca, para rozarme los labios con delicadeza y saborearme sus silencios.
Confieso pretender olvidar cualquier cosa que no haga parte de lo que fue, de lo que solo de vez en cuando existía, pero ya no lo logro. 

Sensaciones empíricas, mundos utópicos sin tiempo. Lo único que persiste es que sigo soñando con la luna y en un tiempo para no pensar. Tiempo para no pensar.


3 buscandome:

Juan Sebastián Rueda Peñaloza dijo...

"Hay quien dice que el amor es un milagro".

Anónimo dijo...

superelo

Francesca dijo...

Supereme

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Bucaramanga, Santander, Colombia

Aquí estoy yo;

Sentada en medio de la noche celando a la luna que llora en silencio.


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