Sin carajadas, tu me cambiaste; me enseñaste a esperar, me enseñaste a sentir y a reir, a ser caprichos- y a sonreir. Me enseñaste a vacilar, a añorar y a imaginar.A llorar, a sufrir, a querer, a amar.SE SUPONIA QUE ERAS MI DESTINO...que todo fue una ilusión y a lo mejor algo pasajero y del momento.
Te confieso entonces que a mi no me molestaba en absoluto la idea absurda del cuento de hadas irreal: el nosotros
Publicadas por Francesca Etiquetas: Recordar no es vivir (punto)
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4 buscandome:
;
uy
se suponia que siempre estarias a mi lado...
me ecanto :)
tiene es toque de dulzura con una pizca de vida real ;)
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