Ahora, es mi turno.

Deja que me siente y te cuente.

Es tarde.
Tarde por el día que se fue y por el que si parpadeo tres veces mas; comienza. 11.59.56 pm

Es hora.

Todo margen entre lo ficticio y lo real ha desaparecido, solo quedamos la música dentro de mi cabeza y yo... dispersándonos en el aire, hirviendo en el tiempo y helandonos con cobardía.

El día se licuó en olvido. El aire se derritió... y la vida apenas comienza.

Una vez pensé en amarlo.

Pero no creas, el amor es re-jodido. Amar sin perder la cabeza, sin regalar el corazón... sobre todo si eres como yo que siempre me entrego por completo y que doy lo mejor de mi es muy dificíl.

Yo sé que me entiendes.

Pero deja que te cuente... si hubo algo.
Aunque a diferencia de muchas historias, en esta no hubo vino de por medio, ni atardecer-es fugaces, ni un baile envuelto en luz de luna.No hubo abrazos eternos, ni besos alucinantes.
Hubo mas de lo que imaginé.

Una canción a medio dedicar.

Susurros y suspiros, sonrisas y pasión.
- Si te pregunto que sientes, que dices?
- Un deseo ni el hijuepuuta.

También ilusiones de cabeza y un lugar eterno en el que se valía sonreír.
Yo lo seguiría si me dejaba... y él a mi.

Celos negados. Lagrimas en silencio.

Un teamo de sorpresa. Un TeQUIERO a la fuerza.
Anochecer y amanecer juntos. Acariciarnos por medio de palabras, sin gestos ni acciones vanas.
Colarnos entre sueños, pensarnos entre canciones.

Hubo algoo... yo sé que si.

La conección que logramos aquella noche en que nos dijimos tanto que nos tornamos transparentes.

...entenderlo pero no compartirlo.
Aceptar que no estaba en condiciones de verme, esperarlo.

Pensarlo, llamarlo.
Buscarlo, seguirlo.
Rendirme.

Él me dió una razón para olvidarme del mundo.
Un amor desentonado.